Nunca supe preguntarte que teníamos.
Creo que nunca lo pensaste tampoco, debido a que para vos siempre fue demasiado simple.. y para mí, demasiado complicado.
Hiciste todo como si fuera un rompecabezas que le habías roto a alguien y lo tenias que armar a escondidas, para que de repente ese alguien llegué y lo desarme por completo en tu cara, y vos, lo dejes pasar.
Siempre nos quedarán las ganas, todo el tiempo que invertimos en vernos y, tal vez, querernos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario